Comprar una vivienda con la pareja es algo muy habitual. De hecho, en 2021 se firmaron más de 210.000 hipotecas compartidas. Sin embargo, también es un paso importante en una relación. Si estás dudando entre firmar una hipoteca compartida o no, quédate hasta el final de este blog, donde te contaremos todas sus ventajas y desventajas.
¿Qué es una hipoteca compartida?
En una hipoteca compartida hay dos titulares que figuran como propietarios de un inmueble. Firmar una hipoteca con un solo titular es algo poco frecuente, ya que requiere una despensa grande de dinero, la cual es difícil que una persona sola pueda asumir.
Además, los bancos son más partidarios de aceptar este tipo de préstamos hipotecarios, al asumir que habiendo dos titulares el riesgo económico es menor, debido a que una pareja ofrece mayor estabilidad y solvencia.
Cuando se opta por una hipoteca compartida, hay que tener en cuenta que cada una de las partes titulares asume un porcentaje de la cuota establecida. Sin embargo, en caso de impago, ambos propietarios tienen la responsabilidad de asumir la totalidad de la deuda.
¿Quién puede solicitar un crédito compartido?
Hace años, las únicas personas que podían obtener una hipoteca compartida eran las parejas casadas. No obstante, hoy en día este tipo de créditos se otorgan también a personas no casadas, por ejemplo: padres e hijos, hermanos, personas que tienen hijos en común o parejas de unión libre.
Ventajas de una hipoteca compartida
Firmar una hipoteca compartida tiene una serie de ventajas con respecto a si lo hiciéramos solos. Las principales son:
- Más seguridad: Al haber dos titulares, habrá más seguridad a la hora de hacer frente a los pagos en caso de que surja algún imprevisto. Por lo tanto, gracias a los ingresos de la otra persona, no habrá problemas para pagar la cuota de la hipoteca, con lo cual el riesgo de impago es menor.
- Mayor facilidad de acceso a la hipoteca: Como ya hemos avanzado, los bancos están más predispuestos a conceder una hipoteca a dos miembros, ya que esto suele ser sinónimo de mayor solvencia económica.
- La capacidad de endeudamiento es mayor: Como la suma de los ingresos de la pareja será mayor que la de una sola persona, la cantidad de dinero que se podrá destinar al pago de la hipoteca también será mayor. Lo que se traduce en poder acceder a préstamos más altos.
Atención: Normalmente, la cantidad máxima de la cuota hipotecaria no puede ser superior al 35% de los ingresos. Si los ingresos son mayores, también podrá serlo la cuota y antes se podrá terminar de pagar la hipoteca.
Desventajas de una hipoteca compartida
A priori, una hipoteca compartida tiene muchos puntos a favor, como hemos visto. Sin embargo, podrían surgir desventajas en caso que haya una separación entre los dos titulares. En ese caso, las desventajas son:
- Dificultad para pagar la hipoteca: Es muy probable que una única persona no pueda hacerse cargo de todo el préstamo hipotecario.
- Dificultad para anular la hipoteca: Eliminar a uno de los titulares es un proceso complicado, ya que el banco pierde garantías en la devolución del préstamo.
Si te encuentras en esa situación, te recomendamos que trates de encontrar una solución con tu banco y renegocies las condiciones de la hipoteca. A partir de ese momento, tienes tres opciones:
- Extinguir el condominio: Esta suele ser la solución más popular. De esta manera, uno de los miembros de la pareja cede su parte al que finalmente será el único propietario del inmueble.
- Cancelar la hipoteca y vender la vivienda: Si ninguno de los titulares quiere o puede quedarse con la vivienda, la opción más sencilla es ponerla a la venta para así poder cancelar la hipoteca con el dinero obtenido.
- Que uno de los titulares compre la otra parte de la casa: Otra de las opciones es que uno de los miembros le pague al otro su parte del inmueble y, así, se convierta en el único propietario. Sin embargo, esto no siempre implica que esta persona quede exenta de pagar la hipoteca, ya que si la entidad bancaria cree que no es viable que una única persona pueda hacerse cargo del préstamo, el titular que ha vendido su mitad seguirá obligado a contribuir a la hipoteca. Esto se debe a que la hipoteca y la compra son dos negocios jurídicos distintos.
Si te has quedado con alguna duda sobre la hipoteca compartida, y quieres una atención personalizada, ¡no dudes en contactar con nuestros asesores!
